El pasado domingo, se descubrieron ejemplares de lobos marinos sin vida en la playa de Camet Norte, un suceso que ha generado gran preocupación entre especialistas y la comunidad en general. Hasta la fecha, aproximadamente 50 de estos mamíferos marinos han perecido, y el futuro de la población restante es incierto.
Un equipo multidisciplinario se encuentra investigando esta inusual situación. Se sospecha que el virus de la gripe aviar pudo haber mutado al afectar a estos animales, aunque aún no se ha confirmado si esta enfermedad podría representar una amenaza para los seres humanos. Por lo tanto, se enfatiza la importancia de no acercarse a los lobos marinos muertos y de evitar que las mascotas lo hagan también.
El presidente de la Fundación Fauna Argentina (FFA), Juan Lorenzani, quien cuenta con más de 40 años de experiencia trabajando con estos animales, expresó su profunda preocupación ante esta situación sin precedentes. Afirmó que a lo largo de su carrera, ha enfrentado diversas circunstancias difíciles, como animales afectados por derrames de petróleo y enfermedades, pero nunca antes había sido testigo de algo tan alarmante como esto.
